DAR LA CARA ES DE VALIENTES ¡GRACIAS POR DARLE LA CARA A LAS VÍCTIMAS!

Después de varios días de terminada la jornada DE CARA A LAS VÍCTIMAS, 36 HORAS POR LA DIGNIDAD, lo más justo es darles infinitas gracias a quienes le dieron la cara a las víctimas, tanto autoridades, como ong’s, ciudadanos y periodistas.

Dar la cara es siempre difícil y hacerlo con valentía es mucho más complicado, por eso solo tenemos agradecimientos perennes para quienes se comprometieron y cumplieron. Como lo hemos dicho muchas veces “destruir es fácil, construir es un ejercicio que solo lo asumen los valientes” y ustedes lo han hecho.

Después de esta jornada quedan algunas reflexiones que debemos hacer para mejorar nuestra actitud frente a las víctimas del conflicto, que son muchas, que crecen cada día y que son altamente vulnerables. Aclaro de antemano que estas son reflexiones generales pero no generalizadas, es decir que no significa que todos seamos indiferentes frente a las víctimas.

Para las autoridades. Hay algunas fuertemente comprometidas, que dieron la cara y tienen un trabajo responsable frente a las víctimas y a este complejo conflicto interno colombiano, que se fortalece, entre muchas otras cosas, por la indiferencia de otras autoridades qué aún no toman en serio este tema.

Me llamó poderosamente la atención el celo de una que otra institución que labora con víctimas. Con el debido respeto pareciese que algunas trabajarán más para la foto que para las víctimas. Si las víctimas no son la razón de ser de muchas entidades que tienen esa tarea en su misión institucional, algo pasa y algo hay que hacer. El llamado es para que se articulen y presten una mayor y mejor atención a estos compatriotas que fueron agredidos brutalmente por la cobarde guerra.

Las víctimas definitivamente deben trabajar mucho más por organizarse local, regional y nacionalmente para convertirse en un verdadero poder de interlocución. Cuando las víctimas hablen este país debe estremecerse, el país con todos sus poderes juntos.

Y los periodistas…los periodistas también debemos comprometernos más. Una tarea de las organizaciones gremiales y de los periodistas de manera personal, es abrir más espacio a las víctimas en sus medios de comunicación, espacio para sus historias, reclamos, propuestas y lucha por su reivindicación. Esto no significa que abandonemos nuestra posición de imparcialidad, por el contrario dando a las víctimas más espacio arreglamos las cargas de nuestros informativos que en la mayoría de los casos tienen cerca del 70% de información oficial.

Cosas quedan, no para sembrar más odio sobre esta tierra sino para asumir las deficiencias y cambiarlas por trabajo más serio, más responsable y más humano, muchísimo más humano.

Como no todo debe quedar en jalarnos las orejas, por petición de instituciones locales, nacionales e internacionales, por el clamor de las víctimas y por la responsabilidad social de los periodistas, ya empezamos a trabajar para una próxima gran jornada, que propongo debe ser en el corazón del poder nacional, en las mismísima Plaza de Bolívar de Bogotá, donde confluyen los poderes legislativo, ejecutivo y judicial.